domingo, 6 de julio de 2014

Crónica de Micro Abierto Libertad 8 (154). 01/07/14



El pasado martes 1 de Julio de 2014 celebramos la edición nº 154 de MAL8 (Micro Abierto Libertad Ocho), dos horas de canción de autor en las que veinte artistas actuamos en un ambiente inmejorable. La sala estaba repleta de público y artistas, pues fuimos treinta y cinco los que nos apuntamos para participar, y se nota que estamos muy contentos por haber logrado financiar nuestro primer disco, “Consciencia, libertad, soledad y gente rara”, gracias al gran esfuerzo que hicimos entre todos. Cada vez se acerca más ese momento soñado en el que sacamos discos de todos nuestros talleres (encontraremos la manera de no volver a hacer un crowdfunding). Ya sabemos que el disco lo presentaremos el martes 29 de Julio en Libertad Ocho, después del MAL8 (158), pronto daremos más detalles al respecto. Ahora intentaré contar lo sucedido en este MAL8 (154), en el que también conocimos a cuatro nuevos participantes.

La sesión comenzó a lo grande, con Juan Fernández Fernández, quien curiosamente cantó Final para empezar, canción en la que canta que “linternas y quinqués, cerillas y mecheros, faroles y candiles, fluorescentes y neones dejarán en herencia, camino al cementerio, destellos en los versos”. Maravillosa canción que quizá forme parte del repertorio que hará este lunes 7 de Julio en su concierto en Libertad Ocho. Ahí estaré para ver a uno de los cantautores mas interesantes y atractivos que he conocido nunca.


Seguimos con gran energía, el siguiente fue Diego Mattarucco, quien nos deleitó con dos breves piezas. En la primera se acompañó al piano para recitar versos como “¿qué veo?, un manto de ondas naranjas, me veo en tu vaho…”. La segunda se titula El sexo, que “siempre es un nexo”, en la que muestra algunas “lecciones”, como: “primero succionas y, si hay pene, se acciona”. Siempre es un lujo para el MAL8 la poesía “cacofónica” de este particular artista.


El tercero fui yo miso, Andrés Sudón. Canté Gente rara, la canción que está incluida en nuestro inminente primer disco. En ella hablo jocosamente de cómo he tenido que ir tramando “mi plan para no ser tan normal como esta gente rara con la que tengo que tratar”, porque “querían que yo también me preparara para un trabajo, para papá parar mi pubertad me encerró con mi pene en mi cuarto…”, entre otras cosas.


Seguimos con la canción ligera de Ángel de Andrés, que, como es habitual nos arrancó unas palmas con Café para dos, en la que pide al camarero lo que propone el título y “una canción para comprender”.


La siguiente fue la poeta Oropéndola, que nos trajo tres poemas “relacionados con la muerte”. El primero se titula Tonatiuh, “dios que rige el paraíso de los guerreros y las parturientas”. El segundo se titula La Catrina, también conocida como “calavera garbancera”, un grabado original de José Guadalupe Posadas, en el que “se mofa” de las indígenas que renegaban de su procedencia y herencia cultural para ser como las francesas. En el tercero, titulado Petatearse, enumera algunos de los muchos nombres y expresiones que se utilizan en México para referirse a la muerte. Muy interesante.


La siguiente en escena fue Lucía Díaz, que, como yo, se decidió a cantar la canción que ha incluido en “consciencia, libertad, soledad y gente rara”, también titulada Gente rara, en la que dice contundentemente: “me declaro un ser humano raro”. La verdad es que estamos muy contentos por saber que nuestro primer disco ya es una realidad.


Juanlu Mora hizo en este MAL8 (154) un homenaje a lo que más queremos aquí; nos cantó una canción titulada Canciones, que están “sosteniendo nuestras emociones como la fotografías de un álbum familiar”. Y es que “todo son canciones (…), si se nos va la vida sin cantar, nos iremos con las manos vacías”. Sabias palabras de uno de nuestros más interesantes creadores.


A continuación salieron a escena Las dos en punto, Rafa y Mila, que nos cantaron una de las canciones de su luminoso repertorio, Otra historia de amor, que “viene a decir que un clavo se saca con otro clavo”, según nos contaron.


Hacía mucho tiempo que no venía por aquí Mayka Alonso, antes miembro del grupo Plolo Positivo, que vino a visitarnos con una pieza preparada para la ocasión en la que recita y canta a capela. Fue una actuación muy bonita y emocionante.


Llegados al ecuador de este MAL8 (154) pudimos conocer a los participantes que vinieron a presentarse por primera vez en nuestro foro. El primero de ellos fue el uruguayo Juan Manuel Silva, cantautor y maestro que está de paseo por España mostrando su trabajo aquí y allá. Nos cantó Tu lugar en el mundo, dándonos instrucciones, como buen maestro, para participar haciendo coros y palmas en su anglófono estribillo: “don´t say goodbye”. Un placer conocerle.


Después conocimos al dúo Irala, una bonita pareja que nos cantaron la historia “de movilidad social” de Limán, quien tiene que vérselas con un mundo civilizado que pone serias trabas a las personas que se alejan de su lugar de procedencia huyendo de la miseria.


El tercer nuevo participante de esta tarde fue Chema, quien nos contó que toca en un “grupo de música dura” y se hace difícil tocar en acústico. A mí me gustó particularmente su canción Para siempre por su original armonía y la oscuridad de su letra. Cuestión de gustos. Me encanta ver llegar a gente nueva y diferente al MAL8, ojalá podamos conocer más de su trabajo.


Aún nos faltaba por escuchar a un nuevo participante, pero antes seguimos con varios míticos del MAL8. Marta Plumilla se quedó prendada del poema que la semana pasada recitó José Miguel González, uno dedicado a los perros Fox Terrier, así que consiguió ese texto y lo musicalizó, haciendo una divertida canción, cuyo estribillo ladra: “¡Nacer, cazar, follar, morir, no hay más!”.


Después salió Caso omiso que cantó una de las canciones de su repertorio que más me gustan, Recordar, en la que dice cosas muy profundas y hace bonitos giros con la voz. Ese día habíamos comido juntos Plumilla, Caso Omiso, José Miguel González y yo, entre otros, y pasamos una grata sobremesa con canciones y poemas.


Así que el siguiente fue José Miguel González, que quiso dedicar su poema a Marta Plumilla en agradecimiento por musicalizar su poema. Presentó La palabra perdida contándonos que “en el segundo Acto de Hamlet, Polonio, padre de Ofelia, pregunta a Hamlet ¿Qué leéis, señor? Y éste le responde <<Palabras, palabras, palabras>>. De eso trata este poema”. Aquí lo dejo para deleite de todos, es un lujo tener entre nosotros a poetas de tal calibre. ¿A alguien se le ocurre qué podríamos hacer para publicar un libre de José Miguel González?

Hay que recuperar la palabra perdida,
sepultada en el hedor de las guerras civiles,
en la belleza de los ríos entrepiernas.
en el nirvana de la muerte para siempre,

Hay que buscar la palabra perdida:
que la palabra “arma” se acurruque con su fabricante
y amante con amado se hundan
en el atroz abismo del dinero.

La vida aún tiene hechizo, tenemos vocación de vocablos,
el gusto de acariciar la palabra recién encontrada.
Palabras cómplices, palabras amantes,
palabras amigas, palabras admirables.

Palabras que evocan cuerpos de adolescentes radiantes:
Maribel ¿dónde para la belleza de tus ojos?
Patricia ¿recuerdas el fuego de nuestro ardor?
Cecilia, tu cuerpo era una frase perfecta.

Palabras de libros que nunca olvidaré:
libros con tormenta como “El rayo que no cesa”,
libros solares como “A la sombra de las muchachas en flor”,
libros para amar como el maravilloso “arte de amar”,
libros obscenos como “El trópico de Cáncer.”

Ha llevado mucho tiempo
aprender a articular palabras,
tantos siglos de gruñidos y de gritos
para ascender al milagro de decir:
“La vida es una sombra pasajera.”

Cómo no asombrarse de poder recordar
sitios que me han traído aquí:
Valencia de Alcántara, Londres, Barcelona,
Amsterdam, Katmandú, Menorca,
¡Ser un romero en la vida!

Cuando sólo queden ruinas
del viejo piso en que habitamos,
ha de seguir viva la palabra.
Cerca ya del final, aún te podré decir:
“Mi corazón es una fiera voraz
que se alimenta de palabras.”

La vida es un pequeño barco de vapor
que conversa dulcemente con el cielo.


La siguiente actuación fue una bonita colaboración entre Javier Cuenca y Silvia de SilNé. Juntos hicieron un tema de Cuenca  titulado Pájaros de los Alpes, una de las canciones que más le gustan a Silvia del disco. La hicieron muy bonita. Me encanta cuando se juntan los participantes para hacer colaboraciones.


A ver si un día nos juntamos el siguiente participante y yo para hacer algo, porque hace muchos años que conozco a Fernándo Álvarez y casi nunca hemos hecho nada, a pesar de que me encanta su trabajo. Vino a cantarnos Cándidamente una divertida historia susurrada y rapeada que no pasó inadvertida ante el numeroso público del MAL8 (154).


De nuevo nos visitaron Persona, grupo del que vinieron en representación Jos y Mirko. Ya comenté la semana pasada que, a priori, me encanta su trabajo. Su canción El entierro de nuestra revolución gustó tanto que hasta les dieron una fecha para actuar en Libertad Ocho este mes. El lunes 14 de Julio podremos ver a Persona en directo en nuestro escenario con toda la banda que quepa.


También la semana pasada conocimos a Lucas, que actuó acompañado por la guitarra de Frutos. Esta ver fue Frutos el que se presentó acompañado por la guitarra de Lucas, que simplemente presentó su canción como “un tema propio”. Me encanta que el MAL8 se vaya llenando de nuevos jóvenes creadores de canciones.


El último en participar fue la persona que mas hizo para que nuestro crowdfunding saliera adelante, al menos facilitó las cosas para que todos pudiéramos promocionarlo: hizo una caricatura de cada uno de los autores que están en el disco, las cuales luego compartimos hasta alcanzar nuestro objetivo. Desde aquí le doy infinitas gracias, no sólo por eso, también por hacer la carátula del disco (que aún no ha salido a la luz). Nos cantó uno de sus grandes éxitos, Mundo rosa, la curiosa historia de Ulpiano Brawm, “un niño marrón en un mundo rosa”.


Con el Tío Antoño terminó esta maravillosa edición, en la que desgraciadamente se quedaron muchos artistas sin actuar. Si os dais cuenta, esta vez no metí mucha prisa a los participantes, recordando una reciente edición en la que sólo actuaron dieciocho artistas, haciendo que el concierto fuera más distendido. En esta de treinta y cinco apuntados sólo actuamos veinte, pero mereció la pena no meter presión, el resultado fue plausible y celebrado. Antes de despedirme quiero contaros dos cosas. La primera es que este verano MAL8 no cierra por vacaciones, habrá micro abierto sin cesar, y puede que con ediciones especiales de verano, de las que ya os contaré los detalles. La segunda es que sigue abierta la convocatoria para apuntarse a los talleres que tenemos próximamente: el día 15 de Julio haremos un taller titulado “España”, para el que hay que traer una canción con ese título, y el día 22 de Julio haremos un taller experimental titulado “Sin título”, para el que hay que traer la letra de una canción sin música en un sobre cerrado y estar en disposición de cantar… Para apuntarse hay que mandar un correo a microabiertol8@gmail.com con el nombre del taller o talleres en los que se quiere participar en el asunto del correo. Gracias a Marta Plumilla por las fotos, a los participantes por participar, a Libertad Ocho por ir a más en su revolución a favor de la buena canción de autor, y a vosotros por leer, comentar y compartir.

Andrés Sudón